Quirología védica: el dedo pulgar y nuestra identidad
El dedo pulgar en quirología védica se llama dedo de Venus. Este dedo ocupa un lugar muy particular en la mano. De hecho muchos quirólogos le dedican más importancia que el resto de la mano ya que revela mucho sobre el carácter de una persona. Es el dedo que ha permitido al ser humano fabricar herramientas, sin él no podríamos hacer la función de pinza.
Está formado por 3 falanges:
- La base, la primera falange, o monte de Venus representa, la sensualidad, la emoción y el amor.
- La segunda falange nos habla de la lógica y la razón.
- La última falange (la de la uña) representa la voluntad.
En muchas culturas cortaban el pulgar a los ladrones: sin pulgar, la voluntad queda mutilada, castrada. Por eso representa el coraje y la tenacidad.
Si se compara la longitud de esas 3 falanges se puede ver lo que predomina en la existencia: sensibilidad, lógica o voluntad.
Si hay un equilibrio en la longitud de las 2 últimas falanges, la persona tendrá igual de fuerza de voluntad y lógica: pensará primero y luego actuará.
Un monte de Venus carnoso, grande y bien desarrollado denota una extrema sensualidad.